En la situación de los rehenes de Hamás,
la alegría y el dolor se mezclan.
Pero lamentablemente el sufrimiento, el dolor, la rabia y la impotencia están a la orden del día por aquellos que debían ser liberados y fueron asesinados.
La vida se complicó para los que vivmos en Israel desde el 7 de octubre del año 2023.
En unos días ya será un año en el que vemos, escuchamos, lloramos y padecemos por los que siguen encerrados en poder de los gusanos de Hamás.
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