Ayer en mi guardia recordé la valentía que tenemos muchos médicos de este país. En horas de la tarde llegó a la emergencia un envenenamiento himenóptero / Apismo (abejas). Tres niños con más de 200 picaduras en su cuerpo acudieron a la emergencia ante lo ocurrido. Uno en mal estado, su vida estaba pendiendo de un hilo. No contábamos con hidrocortisona suficiente para cumplír un básico esquema pirámidal. Corri a mi residencia qué queda cerca del hospital, corría como loco como si esos niños fuesen mios. Y alcance a encontrar en unos de mis koalas esta única hidrocortisona qué tenía, era mia, la compre como muchas cosas que guardo en mi koala. Y me acorde de johan y de todos los médicos que hacemos esto porque sencillamente no hay cosas qué antes eran básicas. Afortunadamente gracias a mi gran equipo de enfermeras, personal de salud y compañera de guardia logramos salvar a esos pequeños. ¿Como no vas a correr si un niño de 6 años te pregunta casi agonizante por lo que le ocurrio que si se va a morir?. Alli el alma se te sale del cuerpo. Es increíble esa sensación de lograr algo maravilloso con lo poco que tienes. Hoy no hablaré de la situación de este país. Hoy me dare junto a todos los MÉDICOS CIRUJANOS VENEZOLANOS un gran aplauso, un abrazo a la distancia y un, VAMOS QUE SI SE PUEDE, qué en Venezuela tenemos talento y personal capacitado. #orgullosoUNEFM #Medicoscirujanos#medicosvenezolanos #teamHIECR | Aún les confieso se me acelera recordar esto.
Cada día es de agradecer a Dios por los dones y capacidades qué nos da
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